LOS INVITADOS de Grupo Máxico expandió las fronteras artísticas
la libertad del otro es el soporte de mi esencia
En paralelo a la participación oficial de los diferentes países y de México y las distintas presentaciones de artistas de todo el mundo en la Bienal de Arte de Venecia 2024, Grupo Máxico, un colectivo de artistas activos en México, organizó una peregrinación artística con el trabajo de 174 artistas y desplegaron sus obras en la ciudad de Venecia a través de 6 rutas artísticas con más de 50 piezas, todas transportadas desde México gracias al apoyo logístico de Morillo Shk.
El Pabellón Máxico, titulado LOS INVITADOS, se llevó a cabo de manera totalmente independiente y llenó la Bienal de una pluralidad inesperada, muchos comentarios positivos y una apertura sorprendente de los visitantes y locales, ya que el hecho de llevar el arte al espacio público permitió disfrutar de las obras de un modo muy distinto, más personal, a como normalmente sucede en un recinto cerrado o tradicional dentro de este marco.
Por su naturaleza, LOS INVITADOS contó con numerosos imprevistos desde la planeación hasta la ejecución del proyecto, ya que Grupo Máxico transportó toda esa obra y la montó para su exhibición en lugares tan diversos como el Arsenal -sede del Pabellón oficial de México-o el Giardini -sede oficial de la Bienal-, hasta otros como museos, plazas públicas, medios de transporte, monumentos y negocios locales.
La exposición de las 50 piezas duró dos meses, pero algunas de ellas continúan expuestas hasta el momento en Venecia, ya fuera por petición expresa de los artistas o por sus especificaciones de montaje. Otras fueron exhibidas por tiempo limitado, dependiendo de su naturaleza, las condiciones del espacio, o a petición de los equipos de artistas, y de todas ellas se hizo un registro fotográfico in situ, que junto con la documentación de algunos procesos creativos formará parte de la segunda etapa de LOS INVITADOS, que consistirá en una exposición colectiva en la Ciudad de México, cuyos detalles serán revelados muy pronto.
Una de las piezas, por ejemplo, era un tributo de bienvenida -un bolsa de mercado con los colores de las banderas de México e Italia, y con un estampado referente a la participación de LOS INVITADOS y Grupo Máxico en la Bienal, a manera de guiño crítico hacia cómo se maneja el mercado del arte y, al mismo tiempo, para celebrar las similitudes entre ambos países– que el colectivo obsequió al acercarse a las distintas personas para obtener la autorización de exhibición de los diferentes espacios fue en la mayoría de los casos fue bien recibida.
“La libertà dell’altro è il sostegno della mia essenza”
(La libertad del otro es el soporte de mi esencia)
En este pabellón se despliega el universo artístico de los equipos con pintura, escultura y dibujo, a través de obras textiles, escritura, performance y video que se fusiona con la arquitectura, lo orgánico y vibrante de los seis distritos que componen toda Venecia, convirtiéndolo en un enorme pabellón donde todos todos los visitantes de la ciudad fueron invitados a este, convirtiéndose en actores con la posibilidad de expandir su horizonte a través de la curiosidad que durante las primeras semanas de la Bienal tuvo a la ciudad al límite de su capacidad.
Dentro de Grupo Máxico siempre hay tres ejes rectores de todo lo que hacen: la confianza, la empatía y el trabajo en equipo, y en LOS INVITADOS estos tres ejes se llevaron al límite en una gran maniobra de organización y logística independiente sin precedentes, un gran performance, una acción que, en sí misma, sólo ha sido posible gracias a ello.
”Todo empezó con una simple idea: compartir lo que ya veníamos haciendo desde hace siete años, sólo que diez veces más grande: invitar a artistas que admiramos y cuyo trabajo nos inspira a crear obras en conjunto que van desde lo lúdico y humorístico, hasta lo solemne y conmovedor. A cada uno le pedimos que formara un equipo con otros artistas a su libre elección, y que crearan juntos una pieza para LOS INVITADOS, un colectivo de colectivos”, afirmó Grupo Máxico.
Morillo Shk se unió a LOS INVITADOS en la logística de movilización de las obras de arte. Su apoyo fue fundamental para poder movilizar toda la obra de México a Italia y de regreso para poder realizar el proyecto, ya que una idea que comenzó con la intención de llevar unas veinte obras a Venecia terminó rebasando las cincuenta piezas.
“Los meses anteriores a nuestra llegada a Venecia fueron muy emocionantes: empezaron a llegar las obras, que hasta ese momento nosotros no conocíamos en realidad, ya que el proyecto trata también de la confianza, de modo que los artistas trabajaron su creación sin ningún tipo de restricción ni vista previa para su revisión. Sólo les pedimos dos cosas: que su obra no pesara más de cuatro kilos y que cupiera en un espacio de veinte centímetros cúbicos, con el fin de que todas pudieran viajar , continuaron.
